Las estrías

Las estrías suponen una rotura de los tejidos cutáneos difícil de reparar en su estado más avanzado.

Si tus estrías son rojas y recientes todavía tienes mucho que hacer, pero si son blancas y viejas tienen menos solución.

Lo primero es utilizar productos muy muy emolientes (grasos) para que la piel esté bien nutrida y elástica y no se rompa.

Hay buenos cosméticos antiestrías en el mercado a los que puedes recurrir, como Retinol Anti-strechs Marks de Roc, pero también hay otras opciones económicas como el aceite de rosa mosqueta (en cualquir tienda de cosmética natural) o la lata azul de Nivea (sí, la de toda la vida), que tiene urea entre sus ingredientes. Muchos médicos se la recomiendan a las embarazadas.

Si las estrías son blancas y las tienes desde hace mucho tiempo, es muy difícil eliminarlas con un cosmético porque el tejido cutáneo está desgarrado.
Para tratarlas tendrías que acudir a un dermatólogo o médico estético que te asesore sobre la posibilidad de hacerte un peeling medio químico, a base de distintas concentraciones de ácidos que descamen tu piel y disimulen la profundidad y cicatriz de tus estrías.