Esponja de maquillaje: Perfect Blender

Moderniza tu manera de maquillarte

Esta esponja en forma de huevo, es el secreto para lograr un maquillaje impecable.
Es hipoalergénica y libre de olor. Su forma de huevo ergonómica y sin bordes facilita el acceso a los lugares más difíciles como las aletas de la nariz o los ojos, donde la punta de la esponja resulta idónea, dejando el producto fundido con la piel sin cortes ni variaciones de color, un difuminado perfectamente integrado en el rostro.
Además no gasta tanto maquillaje como cualquier otra esponja convencional por no contener látex, evitando también alergias.

• Dónde adquirirla

Puedes comprar la original por unos 20€ o una de imitación, como la que uso yo, que tan solo me costó £1 en el Primark de Londres, aunque en Sephora o muchas otras también las venden. 

• Cómo usarla

Hay que humedecerla generosamente, para que aumente su tamano, pierda rigidez y deje un acabado natural. Lo suyo es meterlo en un bote con agua y dejarla unos minutos a que absorba todo el agua que pueda. Acto seguido, escurrir el exceso de agua antes de usarla.

Si usáis base fluida, echaros un poco en el dorso de la mano e impregnar el huevo con toquecitos. También con toquecitos se va aplicando sobre la cara y deja un acabado yo diría que más luminoso y sutil que la brocha mofeta.

También se puede usar en seco, para aplicar productos en polvo de todo tipo: sueltos, compactos, colorete...

• Cómo limpiarla

Para pasar de un producto a otro, se lava bajo el grifo para que se le vayan las manchas de maquillaje que tenga, se escurre bien y se puede usar inmediatamente.
Para limpiarla en profundidad para la próxima vez, puedes comprar un producto especial a base de alcohol en la web oficial, pero lo que yo os recomiendo, primero para ahorraros una pasta y segundo porque  también funciona, es que la limpiéis con jabón suave.

• Lo que más me ha gustado

Lo que más me ha gustado ha sido el pico del huevo, ideal para aplicar el antiojeras y los correctores. Además permite deshacer errores en el maquillaje de los ojos, polvos que quedan fuera del párpado o incluso manchas de rimmel en la ojera.